Una focaccia del más alto nivel. Suave, tierna, esponjosa, crujiente, salada, dorada, ligera... Es perfecta y todo lo que esperas de este tipo de pan.
Puedes utilizarla para hacer tostadas, sándwiches, como base para una tarta de tomate, etcétera.
La receta lleva su tiempo, como todas las recetas de masa de pan.
La cantidad de masa es ideal para un molde de 46×33 cm. Si su molde es un poco más pequeño, la focaccia será más gruesa. El molde a utilizar es una bandeja de horno bastante hueca.
Ingredientes
Masa de focaccia
- 600 g de agua tibia
- 1/2 cucharadita de levadura instantánea o levadura de panadería
- 15 g de miel
- 800 g de harina común
- 18 g de sal fina
- 50 g de aceite de oliva y 2 cucharadas soperas para el molde
- 3 pizcas de flor de sal
- 1 cucharada de romero
Salmuera
- 5 g de sal
- 80 g de agua tibia
Preparación
- Mezclar los 600 g de agua templada, la levadura y la miel en un cuenco.
- Poner la harina y la sal en un bol grande y remover.
- Añadir la mezcla de agua, levadura y miel y el aceite de oliva. Mezclar con una espátula y, a continuación, amasar muy ligeramente con las manos hasta obtener una bola de masa homogénea. La masa quedará muy blanda y pegajosa.
- Reservar a temperatura ambiente con film transparente sobre el molde. Dejar fermentar de 8 a 12 horas.
- Verter unas 2 cucharadas de aceite de oliva en el molde y extenderlo con los dedos.
- Cuando la masa haya subido, levante suavemente los bordes de la masa del molde, sin dejar que se desinfle. Vierta la masa en la bandeja para hornear untada con aceite.
- Con los dedos, extienda suavemente la masa por las 4 esquinas del molde.
- Dejar reposar otros 30 minutos a temperatura ambiente. Si la masa encoge, volver a distribuirla por toda la superficie de la bandeja de horno.
- Mezclar los 80 g de agua con los 5 g de sal. Una vez disuelta la sal, distribuir uniformemente la salmuera sobre la focaccia.
- Dejar reposar otros 45 minutos para que la masa absorba el líquido.
- Colocar una piedra para pizza en el horno (u otra bandeja boca abajo) en la rejilla central. Precalentar a 235°C (450°F).
- Colocar la flor de sal y el romero picado sobre la focaccia.
- Introducir la focaccia en el horno sobre la piedra o en la bandeja volcada. Hornear durante 25 minutos aproximadamente.
- Compruebe el punto de cocción levantando la focaccia con una espátula metálica. Si la parte inferior está dorada pero la superior no tiene color, úntela con un poco de aceite de oliva y vuelva a colocarla en la rejilla superior durante unos minutos.
- Sacar la focaccia del horno, pincelarla ligeramente con aceite de oliva y dejarla enfriar durante 5 minutos.
- Desmoldar y cortar. Servir caliente o fría, acompañada de un buen chorro de aceite de oliva.